¿Cómo ha sido tu trayectoria laboral?

Llegué a Agifes en el año 2007. Soy de Barakaldo, así que previamente estuve en Avifes coordinando las actividades de ocio y también las colonias de Fedeafes, la federación de Euskadi de asociaciones de familiares y personas con problemas de salud mental. Después me marché de cooperante a Venezuela y a mi vuelta me llamaron para incorporarme a Agifes, al centro de Eibar, donde sigo en la actualidad.

¿En qué consiste la actividad que se realiza en el centro de día?

Trabajamos para favorecer el desarrollo cognitivo y psicosocial de las personas con problemas de salud mental para potenciar su autonomía y su capacidad para llevar una vida normalizada. En el centro se desarrollan actividades para recuperar habilidades para la vida diaria. También realizamos actividades fuera del centro como cursos en KZgunea, musicaterapia con la escuela de música de Eibar o talleres de cocina en colaboración con el Instituto Municipal de Formación Profesional Básica de Eibar. Por otro lado, a nivel individual, les ayudamos en lo que necesiten, desde una intervención en el hogar hasta un acompañamiento médico, bancario o de ocio.

¿Cómo es trabajar con las personas usuarias?

La verdad es que no hay un día igual, ya que dependemos mucho de las necesidades que tenga cada persona. La primera hora y media es el momento de la jornada que más me gusta. Es ahí donde decido cómo voy a enfocar el día.

¿Algo que destaques de tu labor?

Uno de nuestros principales retos es motivar a las personas usuarias para que disfruten de diversas actividades, y dar con algo que les llene realmente es muy gratificante. También disfruto mucho con las intervenciones individuales, porque creo que es ahí donde realmente más les ayudamos.